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Te contamos cómo hacer que dos gatos se lleven bien en casa
Si te estás preguntando cómo hacer que dos gatos se lleven bien seguramente es porque te planteas introducir un segundo felino en tu casa.
Es una idea genial, sin duda, pero también supone un cambio importante para tu primer gato, que necesitará adaptarse a la nueva situación.
Los cambios siempre son difíciles, también para los animales, y en especial para un gato que está acostumbrado a ser el rey de la casa, a que nadie le dispute las zonas de descanso ni los mimos de su familia humana.
Sin embargo, es evidente que cada gato tiene su propio carácter, y mientras que algunos reaccionarán con suspicacia, otros darán la bienvenida a su nuevo compañero sin demasiados problemas.
Al pensar en hacer que dos gatos se lleven bien, esa es la primera clave: pensar en cómo es tu gato y qué personalidad tiene.
En este artículo encontrarás una guía completa sobre cómo hacer que dos gatos se lleven bien, con consejos para elegir al segundo gato y pautas para introducirlo en tu vivienda con éxito.
Con un poco de trabajo y suerte, pronto tus dos felinos estarán conviviendo pacíficamente 😉

Los gatos, ¿son animales solitarios o sociales?
Esta es una duda muy frecuente: si los gatos son, como comúnmente se cree, animales solitarios, ¿realmente es buena idea introducir un segundo gato en casa?
Lo cierto es que los gatos no son realmente animales solitarios, o no totalmente. Son fuertemente territoriales, sin duda, pero también son capaces de establecer relaciones sociales jerarquizadas entre ellos.
Es decir: los gatos no dependen los unos de los otros, como si lo hacemos las personas o los perros, pero pueden establecer lazos entre ellos en ciertas circunstancias, como, por ejemplo, cuando los hacemos convivir o cuando forman parte de una colonia.
Los gatos son animales independientes, pero pueden establecer relaciones sociales cuando viven juntos en una colonia o una casa.

Para que los gatos desarrollen esos lazos sociales entre ellos, es necesario que hayan sido correctamente socializados durante los primeros meses de su vida, esto es, expuestos con regularidad a nuevos animales, personas y situaciones.
Un gato mal socializado tendrá muchas probabilidades de desarrollar problemas de conducta: puede mostrarse agresivo, huidizo, tímido o incluso tener comportamientos compulsivos como morder todo lo que le rodea, arañar o maullar sin pausa.

¿Qué beneficios tiene para los gatos el vivir con compañía?
- Tu primer gato no estará solo en los momentos en los que estás fuera de casa, lo que reducirá su nivel de ansiedad y evitará que desarrolle problemas de comportamiento.
- Los gatos se educan entre ellos sobre todo cuando son jóvenes: sus interacciones les sirven para reforzar los comportamientos correctos y evitar los incorrectos (morder en exceso, arañar, etc.) con mayor eficacia que si se lo enseñaras tú mismo.
- Al tener un compañero de juegos siempre disponible, los gatos se mueven más y hacen ejercicio con mayor regularidad que cuando están solos, lo que puede ayudar a prevenir problemas de salud a largo plazo.
- Tener dos gatos también ayuda a que se mantengan mentalmente estimulados y se enfrenten a nuevos retos y juegos a diario.

Cómo hacer que dos gatos se lleven bien: eligiendo al segundo gato
Al pensar en cómo hacer que dos gatos se lleven bien, el primer paso es, por supuesto, conseguir que encajen.
Si ya tienes un gato en casa y estás pensando en adoptar otro, escoger un segundo felino cuya personalidad y comportamiento sean compatibles con los de tu gato actual aumentará mucho las probabilidades de éxito.

Elegir bien al segundo gato es una de las claves del éxito: si son compatibles por edad, carácter y nivel de energía, será mucho más probable que se lleven bien.
Aquí tienes una serie de consejos que te ayudarán a elegir correctamente:
- La mejor opción posible, si aún no tienes gatos, es adoptar a dos gatitos provenientes de la misma camada. Si han convivido desde que nacieron, será mucho más probable que se toleren e incluso se lleven bien cuando sean adultos.
- Si ya tienes un gato, te recomendamos elegir el segundo teniendo en cuenta tres factores generales: edad, carácter y energía. Intenta, en la medida de lo posible, que los dos felinos estén cerca en los tres.
- En ocasiones un felino adulto tolerará mejor a un cachorro que a otro individuo de su edad, pero existe el riesgo de que el gatito exaspere a tu gato con sus juegos constantes y su derroche de energía.
- Si vas a optar por un cachorro para que sea el nuevo compañero de tu gato, fíjate bien en la camada. Evita a aquellos gatitos que parezcan más pendencieros o que bufen con insistencia a sus hermanos.
- Suele decirse que la mejor combinación es un macho y una hembra. Las hembras tienden a ser especialmente territoriales entre sí, aunque los machos pueden ser más agresivos si no están esterilizados. En cualquier caso, y como te decíamos, son más importantes los factores que te mencionábamos en el segundo punto.

5 pautas para conseguir que dos gatos se lleven bien y convivan sin problema
Ahora que ya tienes elegido a tu segundo gato, llega el momento de introducirlo en tu hogar, lo que, como ya imaginarás, es un proceso que debe realizarse de forma gradual y observando con atención cualquier señal de un posible conflicto.
Ten en cuenta que el desarrollo de la presentación e introducción estará condicionada a la naturaleza de los dos gatos: el proceso no puede ser igual si tienes un gato mayor y pacífico que si es joven y enérgico, o quizás algo tímido, dominante, etc.

La presentación e introducción del segundo gato implica seguir una serie de pautas, pero estas deben adaptarse al carácter de tus felinos. A veces el proceso será más fácil y otras, más largo y difícil.
A nivel general, los expertos en comportamiento felino recomiendan seguir estas pautas, que te recomendamos probar con tus felinos y adaptar en caso de que lo veas necesario:
Suficiente espacio y todo por duplicado
Antes de nada, debes plantearte la parte “logística” de la operación.
Y es que, cuanto más espaciosa sea tu casa, más fácil será el proceso de adaptación y mayores las probabilidades de que tus dos gatos se lleven bien o, por lo menos, se toleren.
En una casa de pequeño tamaño, en la que quizás se sientan agobiados por la presencia del otro, los instintos territoriales de los gatos se dispararán con más facilidad, lo que podría dar lugar a conflictos.
Asegúrate, pues, de que tienes espacio suficiente para toda tu familia gatuna.

El siguiente paso será comprar comedero, bebedero y arenero para el segundo gato (si es un cachorro, aquí tienes nuestra guía sobre cómo enseñar a un gato a usar el arenero), así como, si es necesario, juguetes para gatos adicionales. Por muy bien que se lleven, cada gato utilizará su propia bandeja de arena y comerá y beberá en su propia zona.
Durante las primeras semanas, permanece atento a las relaciones de los dos gatos, por si uno de ellos estable una relación de dominación excesiva sobre el otro y le impide el acceso a la comida, el agua o la arena.

Un primer encuentro bien planificado
Manejar bien el primer encuentro y los días sucesivos es fundamental en el proceso de lograr que dos gatos se lleven bien. Hazlo de esta manera:
- Lleva al nuevo gato dentro de un transportín y colócalo en el suelo para que los dos gatos puedan conocerse y olfatearse a través de la rejilla sin riesgo de enfrentamientos. Puedes utilizar feromonas para gatos para engrasar este primer contacto.
- Durante los primeros días, por precaución, instala al nuevo gato en una habitación aparte con todo lo que pueda necesitar (agua, alimento, juguetes, etc.). Este aislamiento preventivo es especialmente recomendable también para prevenir enfermedades como el calicivirus felino, si el nuevo gato viene de la calle o de un refugio.
- En las siguientes comidas, pon los platos de los gatos en los lados opuestos de la puerta de esa habitación (o, mejor aún, deja la puerta abierta y coloca una barrera de seguridad portátil), más cerca el uno del otro en cada comida. El objetivo es que asocien poco a poco el placer del momento de comer con verse el uno al otro.

- Si el nuevo gato parece estar a gusto, invierte los papeles: encierra a tu gato de siempre y deja que el nuevo explore la casa a sus anchas. Mientras tanto, sigue haciendo que coman juntos y cámbiales las camas por las noches para que se acostumbren aún más al olor del otro.
- Por último, empieza a dejarles pasar tiempo juntos, cada día un poco más. Es previsible que al principio haya ciertas señales de enfrentamiento entre ellos (bufidos, pelo erizado, etc.), eso es normal, pero deberás estar atento ante cualquier agresión real.
- Durante las siguientes semanas, sigue vigilando con atención el comportamiento de los dos gatos.
El primer encuentro es un momento clave: deberás darles tiempo para que se vayan conociendo e ir aumentando poco a poco el tiempo que pasan juntos, siempre con atención ante cualquier señal de enfrentamiento.

Dales tiempo y respeta sus espacios
Puede que pasen varias semanas hasta que tus peludos se acostumbren el uno al otro, así que lo mejor es que te lo tomes con paciencia.
De hecho, es posible que al principio prefieran estar en zonas separadas de la casa y no se junten demasiado. Si es así, respeta sus espacios y sus ritmos; como ya hemos comentado, cada gato tiene su propia forma de ser y no todos viven estas situaciones de la misma forma.
Por supuesto, quieres tener a tus gatos acurrucados juntos en el sofá, a tu lado, pero tendrás que darles un poco de tiempo hasta llegar a eso😉

Deja que desarrollen su propia jerarquía
Entre tus dos gatos se producirá un juego de dominación y sumisión que es natural y en el que, por lo tanto, no debes intervenir salvo que se produzcan peleas continuas o uno de los dos animales viva con estrés (lo que notarás por señales como apatía, timidez, caída de pelo, pérdida de apetito, etc.).
Más allá de eso, que uno de los dos gatos adopte un papel más sumiso frente al otro es del todo normal y no supone ningún problema. Al contrario: este tipo de esquemas sociales son fundamentales para que la convivencia entre gatos funcione bien, por lo que no es recomendable que interfieras en ellos.

No necesariamente tienen que ser los mejores amigos
Tienes que estar preparado ante la idea de que quizás tus dos gatos no se conviertan en amigos inseparables. Y es que, como sucede con las personas, los animales no siempre son compatibles entre sí.
Pero eso no tiene por qué ser un problema si tus gatos llegan a respetarse y tolerarse el uno al otro, que es lo básico para que puedan convivir.
Quizás con el tiempo su relación evolucione, pero eso es difícil saberlo. En cualquier caso, haber creado un espacio seguro y libre de estrés para los dos felinos ya puede considerarse un éxito.

Puede que tus dos gatos no se conviertan en amigos inseparables, pero será suficiente con que se toleren y respeten en un ambiente libre de estrés para ambos.
Recordatorios que tener en cuenta al introducir un segundo gato
- Como siempre te recomendamos, evita enfados y los castigos en los momentos de frustración. Ante la duda, emplea siempre el refuerzo positivo, y recuerda: la introducción de un segundo gato en casa supone un cambio tremendo para el primer felino. Sé paciente.
- La convivencia exitosa de dos gatos adultos puede tardar fácilmente entre uno y dos meses en lograrse. Si se trata de un cachorro y un adulto, el proceso puede durar de dos semanas a un mes.
- Prepárate ante la posibilidad de que, pese a todos tus esfuerzos, la introducción salga mal. Algunos gatos sencillamente no podrán convivir con otros, hagas lo que hagas. Si ves que uno de los dos gatos le hace la vida imposible al otro, no los fuerces a seguir conviviendo.