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¿Cómo saber si tu gato es feliz viviendo a tu lado?
Seguro que en más de una ocasión te has preguntado cómo saber si tu gato es feliz y si está a gusto viviendo contigo. Y es que es un hecho que nos cuesta leer las emociones de los gatos mucho más que las de los perros, ya que el carácter de los felinos es diferente y muy particular.
Cuando vivimos con un gato, obviamente queremos que nuestro amigo peludo esté lo mejor posible en todos los aspectos, con todas sus necesidades cubiertas. Pero no siempre conseguimos interpretar su lenguaje corporal para descubrir si lo estamos haciendo bien.
Aunque los gatos tienen la merecida fama de ser más independientes que los perros, lo cierto es que sí, también se comunican con nosotros. Y cuando están felices nos lo transmiten de muchas maneras diferentes (igual que lo hacen cuando se sienten disgustados o les falta algo): solo hay que saber cuáles son las señales.
Ya para ayudarte con eso, en este artículo vamos a contarte con detalle cómo saber si tu gato es feliz contigo: estos son todos los comportamientos y señales en los que debes fijarte. ¡Toma nota!

¿Mi gato es feliz en casa? 12 señales que indican que sí
Como decimos, los gatos expresan con claridad su satisfacción (o falta de ella) por vivir a tu lado y la cuestión es aprender a interpretar correctamente su comportamiento.
En concreto, es posible saber si un gato se siente feliz y tiene sus necesidades cubiertas examinando tanto en su lenguaje corporal como sus hábitos y comportamiento.

Señales de felicidad en el lenguaje corporal del gato
Al igual que los perros, los gatos expresan su estado de ánimo, en primer lugar, a través de su lenguaje corporal. Busca estas señales:
- Cola levantada: un gato contento se moverá por la casa y acudirá a saludarte con la cola levantada y la punta ligeramente curvada. Si, en cambio, siempre suele tener la cola caída, puede ser señal de que está decaído o asustado.
- Ojos entrecerrados: una mirada con los ojos entornados o entrecerrados es también otra señal clara de aprecio y satisfacción. Incluso puede que las pupilas de tu gato se ensanchen al verte. Si te preguntas cómo saber si tu gato es feliz, ¡fíjate en cómo te mira!
- Orejas orientadas hacia delante: si el gato camina por la casa con las orejas erguidas y orientadas al frente, es buena señal. Lo contrario sería verlo con las orejas gachas, plegadas sobre la cabeza.
- Bigotes extendidos: los bigotes de un felino no solo son un sorprendente radar biológico (como te contamos en nuestros artículos sobre curiosidades de los gatos y qué pasa si le cortas los bigotes a un gato), sino que también nos dan información sobre su estado de ánimo. Si están extendidos, buena señal; si por el contrario los ves más bien pegados a la cara del gato, podría indicar que está ansioso o decaído.
Cola erguida, orejas hacia el frente, bigotes extendidas… hay varias señales físicas que indican que un gato se siente seguro y a gusto: solo es cuestión de conocerlas y fijarse.

Señales de felicidad en los comportamientos y hábitos del gato
En segundo lugar, te aconsejamos que te fijes en el comportamiento de tu gato y en su forma de relacionarse contigo:
- Ronronea a menudo: el ronroneo es una de las más conocidas y claras señales de satisfacción de un gato. Si tu gato ronronea mientras lo acaricias o cuando está tumbado, ¡buena señal! Ten en cuenta, en cualquier caso, que el ronroneo también puede significar otras muchas cosas, como te contamos en nuestro artículo sobre por qué ronronean los gatos.
- Tiene apetito: que un gato coma con normalidad y buen apetito suele indicar que se siente bien tanto a nivel físico como mental. Una repentina falta de apetito, por el contrario, sería un indicio preocupante.
- Se asea tranquilamente: el ritual del aseo es fundamental para los gatos, pero solo lo realizan cuando se sienten relajados y en un entorno seguro. Por lo tanto, si tu gato pasa horas y horas aseándose en el sofá, puedes pensar que se siente satisfecho.
Un gato que se sienta seguro y cómodo realizará sus rituales de aseo, dormirá a pierna suelta y jugará y pedirá mimos. Si esos comportamientos están ausentes, puede ser mala señal.

- Usa el arenero con normalidad: como sucede con el apetito y el aseo, un uso normal del arenero también sugiere que un gato está bien. Un felino estresado o ansioso (pero también uno enfermo) podría tener dificultades para hacer sus necesidades o desarrollar la costumbre de hacerlas en lugares extraños, ocultarlas, etc.
- Duerme como un bebé (y a tu lado): los gatos pasan una gran parte de su vida durmiendo, pero solo lo hacen con tranquilidad cuando se sienten bien. Y por cierto: si lo hace a tu lado, es que está especialmente a gusto contigo.
- Pide mimos: ¿tu gato no para de buscarte para que le acaricies y juegues con él? ¡Buena señal! Si tu gato quiere mimos y atención, es que sus necesidades más básicas están cubiertas y que se siente bien a tu lado.
- Juega y corretea con energía: si a tu gato le encanta correr de aquí para allá y juega sin parar, sin duda está feliz. Un gato ansioso o temeroso tendría una actitud muy diferente.
- Te mordisquea y lame, frota su nariz contra ti… Todas estas no son solo señales de bienestar, sino también indicios de que tu gato te quiere y está a gusto concretamente pasando tiempo contigo. Por cierto: otro indicio muy claro en ese sentido es el amasado, un curioso comportamiento del que te hablamos en el artículo por qué mi gato me amasa.

El consejo más importante: conoce a tu gato
Todas esta son señales claras que comparten muchos felinos y que sin duda son una buena guía si te preguntas cómo saber si tu gato es feliz. No obstante, el consejo más importante que podemos darte es que conozcas a tu gato y te fijes en sus costumbres y manías.
Ya hemos comentado que los felinos, en general, tienen fama de ser independientes. Sin embargo, también es cierto que cada gato es un mundo aparte y algunos pueden ser más afectuosos y expresivos que otros. Es posible, por lo tanto, que las señales que emita tu gato sean diferentes o, por ejemplo, que se sienta bien, pero sea de naturaleza menos afectuosa.
Esfuérzate por conocer a tu gato, en concreto, e identifica sus señales particulares de confort. Cada gato es diferente y puede que el tuyo sea más o menos afectuoso o expresivo que la media.

¿Cómo mejorar y potenciar tu relación con tu gato?
Ahora que ya tienes una guía sobre cómo saber si tu gato es feliz, queremos aprovechar para darte una lista rápida de consejos que te ayudarán a mejorar tu relación con tu gato, fortalecer vuestro vínculo y, por encima de todo, conseguir que se sienta más satisfecho. Son los siguientes:
- Comparte tiempo de calidad con con él: juegos, mimos, adiestramiento… en definitiva, ofrécele estimulación física y mental.
- Recompensa siempre sus buenos comportamientos.
- Cuando haya que corregirlo, hazlo en positivo y de la forma adecuada (te lo contamos en nuestro artículo sobre cómo castigar a un gato cuando se porta mal).
- Aprende y respeta sus preferencias y límites.
- Trátalo siempre con cariño y respeto.
- Ofrécele todos los cuidados que necesita: alimentación de calidad, accesorios y juguetes, arenero, comedero y bebedero, atención veterinaria…