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¿Por qué mi gato me acompaña al baño? Estos son los motivos
¿Por qué mi gato me acompaña al baño? ¿Qué puede querer de mí en esos momentos? Si vives con un gato, es muy probable que te hayas hecho estas preguntas en más de una ocasión. Muchos gatos comparten esta curiosa costumbre que hace que sus dueños acaben duchándose o lavándose los dientes con un espectador peludo mirándolos fijamente.
Los gatos tienen fama de ser animales mucho más independientes que los perros y seguro que el tuyo pasa muchas horas al día acicalándose, durmiendo, patrullando la casa y, en definitiva, dedicándose a sus propios asuntos. Si es así, ¿por qué decide acompañarte siempre que entras al baño?
Cada felino es diferente, partimos de esa base, pero, si te preguntas por qué mi gato te acompaña al baño, en este artículo vas a encontrar los motivos más habituales de este comportamiento. Si quieres saber por qué nunca consigues ducharte ni hacer tus necesidades a solas, sigue leyendo.
6 razones por las que tu gato te acompaña al baño
Si sientes que llevas mucho tiempo sin poder estar a solas en el baño, puedes tener el consuelo de saber que no eres el único. La costumbre de los gatos de acompañar a su dueños incluso a esa habitación está muy extendida, como puedes ver.
Entre los motivos más frecuentes que llevan a los gatos a acompañarnos incluso en esos momentos íntimos están los siguientes:
1. Tiene curiosidad
Si te preguntas por qué mi gato me acompaña al baño siempre, el primer posible motivo es el más sencillo: tiene curiosidad por ver qué haces.
Los gatos son animales especialmente curiosos, eso ya lo sabrás, y observarnos es para ellos una fuente de constante entretenimiento. Por supuesto, tu gato no tendrá ni idea de qué haces cuando te lavas los dientes o te duchas, pero puede que le parezca muy entretenido verte igualmente.
Además, también puede que tu gato se sienta atraído por el olor cuando utilizas el baño para hacer tus necesidades. Para ellos, como para los perros, los olores de ese tipo son claramente identificables y están llenos de información, así que puede que tu gato no quiera perdérselos.
Uno de los motivos más habituales y simples por los que los gatos nos siguen al baño es la curiosidad. Les gusta y entretiene ver qué hacemos, aunque no lo entiendan.
2. Tiene hambre, sed o alguna otra necesidad
Si tu gato te sigue no sólo al baño, sino a todas partes, puede que tenga hambre o sed. A los gatos les gusta tomar varias raciones a lo largo del día, así que si ve que su plato está vacío puede que decida perseguirte por toda la casa, incluso sin dejar de maullarte, para que le des de comer.
Si crees que este puede ser el caso de tu gato, has de saber que las fuentes para gatos y los dispensadores de comida automáticos te ayudarán mucho en la tarea de mantener a tu peludo bien hidratado y alimentado con el mínimo esfuerzo y sin riesgo de pasarte o quedarte corto.
3. Se ha convertido en parte de su rutina
También es posible que tu gato te siga al baño en momentos concretos porque ya conoce bien tu rutina (los gatos, como nosotros, son animales de costumbres y tienen un buen reloj interno) y se ha adaptado a ella.
Así que, si tu gato te visita en el baño todas las mañanas, cuando te estás arreglando antes de ir a trabajar, o durante tus excursiones nocturnas, puede que sea porque ya sabe cuándo vas a ir y ha cogido esa costumbre. Tan sencillo como eso.
Puede que tu gato conozca tus costumbres y te acompañe al baño en momentos determinados (por la mañana, por ejemplo) porque ya sabe que vas a ir y se ha adaptado a ello.
4. Refuerzo positivo
¿Por qué mi gato me acompaña al baño? Pues, aunque te sorprenda, puede ser porque en cierta forma le has animado a hacerlo utilizando -incluso sin saberlo- el refuerzo positivo.
Si todas las mañanas, cuando tu gato te visita en el baño (seguramente el primer sitio al que vas tras despertarte), le das caricias para saludarle, le hablas y achuchas, él habrá aprendido que cuando entra en el baño pasan cosas buenas.
Lo mismo se aplicaría si, por ejemplo, le sueles cortar las uñas o lavarle los dientes en el baño y durante el proceso le das chucherías para que se mantenga tranquilo. Son refuerzos positivos que tu gato puede asociar no sólo con lo que estás haciéndole, sino también con el entorno.
5. Te quiere y busca tu compañía
Que tu gato te siga incluso hasta el baño puede ser una señal de apego. Normalmente los felinos no son tan claros como los perros con sus demostraciones de afecto, pero cuando crean un vínculo con una persona quieren pasar tiempo con ella, piden caricias y, por supuesto, la siguen allá donde va.
Cada gato puede tener su propia forma de demostrar que quiere a su dueño y acompañarlo al baño es una de ellas. Puede ser una demostración de afecto un poco incómoda, pero… ¡es afecto al fin y al cabo!
Por cierto, si te emocionas pensando en el cariño de tu gato y lo especial que es vuestra relación, no te pierdas este artículo con 70 frases de gatos y dueños de personajes célebres. Te va a encantar.
Puede que tu gato te siga al baño porque te quiere y le gusta pasar tiempo contigo, sin que haya nada de malo en ello. Sin embargo, vigila la aparición de otras señales que podrían indicar que sufre ansiedad por separación.
6. Ansiedad por separación
Que tu gato te siga a todas partes, incluso al baño, normalmente puede interpretarse de forma positiva o, en cualquier caso, no será algo de lo que debas preocuparte. Pero este tipo de comportamientos en ocasiones esconden un problema: la ansiedad por separación.
Cuando un gato sufre de ansiedad por separación no sólo sigue a su dueño allá a donde vaya, sino que también muestra comportamientos anormales como vocalizaciones excesivas, destrucción de su entorno o acicalamiento exagerado, entre otros.
La ansiedad por separación puede ser difícil de corregir, pero no imposible. Si crees que tu gato puede sufrirla, te aconsejamos que te pongas en manos de un experto en comportamiento felino para que te indique cómo proceder en tu caso.
¿Cómo evitar que el gato me siga al baño?
Ahora que ya tienes la respuesta a la pregunta de por qué mi gato me acompaña al baño, lo siguiente que seguramente querrás saber es: ¿cómo evitarlo?
Por supuesto, puedes simplemente coger al gato, dejarlo fuera y cerrar la puerta, pero con eso sólo conseguirás que se quede sentado al otro lado y se sienta confundido.
Con un poco de trabajo, paciencia y cariño puedes conseguir que tu gato entienda que no puede entrar en el baño. Porque los gatos son inteligentes y, pese a su fama, es posible adiestrarlos y enseñarles lo que pueden hacer y lo que no para garantizar una buena convivencia.
Aquí tienes varios consejos que te ayudarán a evitar que tu gato entre al baño:
- Enriquece el ambiente de la demás habitaciones con juguetes, rascadores y otros elementos de forma que para el gato resulten más entretenidas.
- Redirige la atención del gato cada vez que quiera entrar al baño: lánzale un juguete en dirección opuesta, tírale una golosina o procura que otra persona lo llame.
- Entrena al gato mediante el refuerzo positivo. Cada vez que intente entrar al baño, dile en voz alta, clara y firme (pero sin gritar ni mostrarte agresivo) “NO”. Puede que al principio el gato se detenga, desconcertado, pero si no lo hace, cógelo, ponlo en la puerta y dale uno de sus snacks. A medida que sigáis practicando, dale más snacks siempre que acierte y se detenga en la puerta al escuchar tu orden.
Evitar que tu gato te siga al baño es posible, pero no sencillo. Necesitarás tiempo, paciencia y muchas chucherías, pero si eres constante conseguirás que tu amigo peludo respete tus momentos de intimidad.
